Había una señora llorando en una banqueta, cuando de repente llega un borrachito y le pregunta:
¿Por qué llora?
La señora le dice:
Es que mi nieto saltó de un edificio y ahora está en el cielo.
Y el borrachito le dice:
¡Que buen rebote!
En el examen, el profesor le dice al alumno que no ha sabido contestar a ninguna pregunta:
Le haré una última pregunta, si sabe, le aprobaré.
¿Cuántos pelos tiene la cola de un caballo?
Treinta mil quinientos ochenta y tres.
¿Y cómo lo sabe?
Perdone profesor, pero esa ya es otra pregunta.
Llega un hombre a la consulta del doctor y le pregunta:
Y bien doctor, ¿cómo me encuentra?
El doctor lo examina y le dice:
Tiene el hígado destrozado, sus pulmones no sirven, artritis hasta el tuétano, y de paso taquicardia.
El hombre al escuchar todo eso sale muy triste del consultorio, y en eso va pasando una carroza fúnebre y el hombre le hace señas y le grita:
¡Taxi!
Iba un inspector caminando por los pasillos de un manicomio, acompañado del director, haciendo la inspección de rutina, cuando por la parte de atrás pasa un interno corriendo a toda prisa, haciendo el ruido de una motocicleta.
El inspector le dice al director:
¿Sería usted tan amable de decirle a ese interno, que no haga eso?
¿Por qué? Le interroga el director, ¿acaso le molesta el ruido?
¡No, me molesta el humo!
Llega un borracho al baño de la cantina a las 2 a.m., y en el suelo ve un billete viejo y deteriorado de mil pesos. El borracho dice: Yo por esa plata no me agacho. Mete la mano al bolsillo, saca un billete nuevo de veinte mil pesos y lo tira al suelo y dice: Por veintiún mil pesos si me agacho.
Estos eran dos individuos que fueron a buscar trabajo, el entrevistador le pregunta a uno de ellos:
Tú, ¿qué sabes hacer?
A lo que el individuo le contesta:
Nada.
¿Y el que anda contigo?
No, ése es mi ayudante.
Jaimito entra a un negocio y dice:
Un par de anteojos, por favor.
Y el vendedor le dice:
¿Para el sol?
Jaimito responde:
¡No, para mí!
Se encuentran dos amigos y uno le dice al otro:
Mi papá va poner un kiosco en la Boca.
Y el otro le pregunta:
¿Y cómo va a hacer para lavarse los dientes?
¿Cuál es el mar más Toyota?
El maremoto
Un joven a quien no le gustaba que le dijeran limonada se compró un rifle para dispararle al primero del barrio que lo llamara con ese sobrenombre.
Sus compañeros del vecindario lo sabían y cuando lo vieron pasar se pusieron de acuerdo:
Uno empezó y dijo hielo, el otro gritó agua, y ya en ese momento el joven limonada levantó su rifle en señal de cólera, el otro gritó limón y enseguida el joven limonada apuntó su rifle a los cuatro y el último dijo azúcar, en ese instante, el joven a quien le decían limonada dijo enojado:
Si lo revuelven los mató a todos.
lA tEcLa BlOcK mAyUs De Mi CoMpUtAdOr PaRpAdEa ToDo El dIa, ¿eS eSo MuY gRaVe?
¿Cuál es el colmo de un astrónomo?
Tener amores platónicos
¿Qué es un ladrillo?
El gritillo de un perrillo.
¿Qué es la cuña?
La cama del Ñeñe.
¿Qué se pone Superman cuando sale de la ducha?
Super fume.
Estaban dos borrachos en un bar y uno le pregunta al otro:
Oiga compadre, hip, ¿por qué a usted le gusta tomar?
Y el otro le contesta:
Pos para verme más guapo, bello, y hermoso.
El primer borracho vuelve a preguntar:
Y, ¿por qué dice que se ve más guapo, bello y hermoso?
Pos, porque cuando llego a mi casa mi mujer me dice, "muy bonito, muy bonito".
Aquélla ama de casa tenía tan mal carácter que ninguna muchacha le duraba. La última que tuvo se marchó indignada no sin antes decirle a su patrona que se hallaba en la dulce espera:
Le deseo que nazca bien el varoncito.
¿Y cómo sabe que será niño?, pregunta sorprendida.
Porque a usted, no hay mujer que la aguante nueve meses.
Está este hombre hablando con su amigo y le dice:
Ya di el primer paso para mi divorcio.
El amigo le pregunta:
¿Y que hiciste?
Y contesta:
¡Me casé!
El maestro pregunta:
¿Qué pasa si pongo una barra de fierro en el agua?
Y en la última fila se escucha:
Se oxida.
Luego el maestro dice:
¿Y si pongo una de oro?
Y se escucha:
¡Desaparece!
Era una vez una fiesta de puntos, de repente tocan a la puerta y abre el punto, este se queda mirando y dice:
No puedes entrar, eres una coma.
Y la coma dice:
No soy una coma soy un punto.
Y el punto le cierra la puerta en la cara. Más tarde vuelven a tocar la puerta, cuando el punto abre la puerta dice:
Otra vez tú, te dije que no puedes entrar porque eres una coma, y esto es una fiesta de puntos.
Y el punto vuelve a cerrar la puerta en la cara. Luego vuelven a tocar la puerta.
Cuando el punto abre la puerta dice:
¡Tú otra vez! ¡Te he dicho dos veces que no puedes entrar!
Y la coma dice:
Déjame entrar que soy un punto, ¿no ves que tengo gel para el cabello?
Este era una vez que un señor llega borracho a su casa a las 4 de la mañana, y como no tenía llave se dirigió al patio de su casa, de repente ve que el perro de su casa tiene un lorito muerto en la boca, y el tipo dice:
¡Dios mío!, si es el lorito de la señora del lado.
Al señor le dio pena y puso al lorito en la jaula de la vecina y se acuesta a dormir. Al otro día se despierta y ve que su esposa está llorando y le pregunta:
¿Amor, por qué estas llorando?
Y le dice su esposa:
Es que se murió la vecina del lado.
Y dice el esposo:
Cómo va a ser, si ayer la vi bien y en perfectas condiciones.
Y le dice la esposa:
Es que le dio un infarto esta mañana. Porque ayer había enterrado al lorito que se le murió y se le apareció en la jaula esta mañana.
¿Por qué los gorilas tienen las narices tan grandes?
Pues, porque sus dedos son enormes.
¿Qué es más alto que un pino, y pesa menos que un comino?
El aire.
¿Cuál es la casa del rock?
La casa parockial.
Entrevistan al Presidente en una junta de deportes y dice:
Cuando yo era joven pertenecía a un equipo de béisbol, pero me botaron.
Caramba Presidente, ¿Por qué lo botaron?
Porque me robe la segunda base.
Pero Presidente, si eso mas bien es bueno, eso quiere decir que usted tiene rápidez en las piernas.
Sí, pero lo que pasa es que yo estaba en la tercera base.
¿Cómo se llama el pez que usa corbata?
El pez-cuezo.
¿En qué se parece una mujer a una pelota?
En que la puedes botar cuando quieras.
Llega un lepero al bar del pueblo y deja atada su perra a un árbol. Al instante una jauría de perros se arremolina a su alrededor tratando de conquistarla. En medio de un concierto de ladridos, gruñidos, mordiscos y aullidos, un policía entra al bar y pregunta por el dueño de la perra. El lepero, que estaba tomando un vaso grande de ginebra, levanta la mano y dice: "yo".
- Su perra está alzada, -le dice el policía.
- No puede ser, yo la dejé en el suelo, - responde el lepero.
- Quiero decir, que está en celo, - insiste el policía.
- No puede ser, yo jamás le di motivos, ni siquiera miro a otras perras.- contesta el lepero sediento.
- Digo que está caliente, ¿me entiende?
- No, no lo entiendo, me cercioré de dejarla a la sombra.
Exasperado, el policía exclama:
- Sígame, y diciendole al oido , su perra quiere tener relaciones sexuales.
El lepero le responde:
- Entonces, siga nom ás. Siempre quise tener un perro policía"
Un marido le dice a su mujer:
¡María, ajusta la tele!
Y viene María y hace:
¡Uuuuuuuuuh!
Errar es de humano, dijo una tortuga, al bajarse de un casco militar.
¿Qué pondrías en la lápida de tu suegra?
¡Rip-Rip!, !Hurra!
¿En qué se parece un espermatozoide a un hombre?
¡En que de millones solo uno es bueno!