Letrero en el parque:
No pisar el césped, no correr, no gritar, no tirar basura, no escupir, no acostarse, no jugar, no maltratar, no arrancar el césped, no hacer tiendas de campañas, no comer, no beber ni tirar agua, no subirse a los árboles, no traer animales, no jugar a la pelota, no pisar el césped, y no olviden "EL PARQUE ES SUYO".
Esta era una vez en que se estrelló un avión, llega el FBI, la CIA, y otros cuerpos más de investigación y consiguen al único sobreviviente que era un monito. A este lo llevan a un centro científico para comunicarse con él y le preguntan al monito:
Monito monito, ¿cómo iban los pasajeros?
El monito responde:
Gui, gui, guiillliii (con los manos en los ojos)
Y monito, monito, ¿cómo iba el copiloto?
El monito responde:
Gui, gui, guiillliii (con los manos en los ojos)
Y, monito, monito, ¿cómo ibas tú?
El monito responde:
¡Ññññiuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuu!(simulando las manos en el volante).
¿Sabes por qué los leperos siempre abren la leche en los supermercados?
Porque dice: Abrir aquí.
En un estudio de un fotógrafo.
Por favor, hágame una foto de medio cuerpo.
Sí señor, colóquese aquí.
Tan pronto se pone en posición pone una cara sufrida que el fotógrafo le dice:
Así no señor, por favor ponga una cara más alegre, más feliz.
Y el tipo le contesta:
No, ni hablar, la foto es para mi esposa que está de vacaciones en casa de su madre, y si pongo cara de satisfacción se regresa de inmediato.
Estos son dos locos que se quieren escapar del manicomio, suben por el tejado y tienen que saltar de una casa a la otra, va el primero y salta y se le cae una teja, y el guardia que estaba abajo pregunta:
¿Quién anda ahí?
y el loco dice:
Miau, miau.
El guardia se calma. Entonces salta el otro y se le vuelve a caer una teja. El guardia vuelve a preguntar lo mismo a lo que el loco le responde:
Otro gato.
Nunca pude estudiar derecho.
El Jorobado de Notre Dame
Era un grupo de excursionistas de la escuela, y fueron a un parque de diversiones, entonces entran a la casa de los espantos y una niña se queda poco a poco atrás y separada del grupo. En eso le sale el conde Drácula y le pregunta:
¿Oye, te doy miedo?
Y ella le responde:
¡No gracias, ya tengo mucho!
¿Por qué los leperos ponen un tomate detrás de la radio?
Para escuchar SALSA.
¿Cuál es el santo que quita el hambre?
El Sanwich.
¿Por qué el perro lleva el hueso en la boca?
Porque no tiene bolsillo.
¡Antonio! ¡Estoy embarazada!
Tranquila mujer, A)bortar, (R)eintentar, (I)gnorar.
Viene una señora gorda con una gallina debajo del brazo y un borracho le dice:
Hip, ¿pa´ dónde vas con esa cochina?, hip.
Y la señora responde:
Señor, ¿usted no ve que es una gallina?
Y el borracho le dice:
Perdón, estoy hablando con la gallina, hip...
Homerito, ¿de qué vive tu papá?
Mi papá vive de las letras.
Ah, ¿es escritor?
No, sufre de diabetes y vive tomando vitaminas A, B, C, D.
Abre la ventana pa' que entre el fresco.
Y el fresco se llevó todas las joyas.
El abogado a su defendido:
Lo siento mucho, pero ya no sé qué decir para librarlo de la silla eléctrica.
¿Por qué no dice que fue usted?
Era un grupo de excursionistas de la escuela, y fueron a un parque de diversiones, entonces entran a la casa de los espantos y una niña se queda poco a poco atrás y separada del grupo. En eso le sale el conde Drácula y le pregunta:
¿Oye, te doy miedo?
Y ella le responde:
¡No gracias, ya tengo mucho!
Entre dos borrachos
- Pues yo dedico 20.000 semanales a lucha contra el alcoholismo
- ¡Qué no te creo!
- Que sí, cuanto más bebo yo, menos beben los demás.
Estaba Jaimito portándose mal como de costumbre y la mamá le dice:
Jaimito, pórtate bien o te voy a meter al cuarto de Satán.
Jaimito continuó portándose mal y la mamá lo metió al cuarto de Satán. A los 5 minutos se escuchan patadas, golpes, se quiebra un vidrio...
La mamá de Jaimito va a ver que pasa, y en eso sale Satán llorando y dice:
Señora, dígale a Jaimito que me devuelva mi tenedor.
La mamá de Jaimito estaba embarazada, entonces viene Jaimito y le dice:
Mamá, ¿qué tenés en el estómago?
La mamá le contesta:
Aire, Jaimito.
A los nueve meses nace el niño y Jaimito le dice:
¡Hola Pedo!
¿Sabe, compa? Las mujeres esperan ansiosas que lleguen mis cartas.
¡Vaya! ¿Tiene mucho éxito con las mujeres, compadre?
No tanto, yo me refería a lo que pasa con mi nueva chamba de cartero.
Un borracho en un barco se cruza con un marinero y le dice: ¿Donde está el Capitán?.
-Por babor.
A lo que replica el borracho:
-¿Por favor donde está el Capitán?.
Un mexicano con grandes pistolas bebía su tequila en la barra de una bar, cuando entra otro mexicano con cara de pocos amigos, igualmente armado.
El parroquiano increpa al visitante:
Oye tú, ¿Cómo te llamas?
El visitante responde en el mismo tono.
Pos, no te digo nada.
Ante la negativa, el parroquiano, con voz más dura, repite:
Oye tú, ¿No me dirás tu nombre?
El visitante contesta, con mirada indiferente:
Ni modo, a lo cual el parroquiano saca su pistola y le efectúa tres disparos que lo dejan tieso. Luego mientras soplaba el humo del caño de su pistola murmura:
Mañana me entero en los periódicos.
Mamá, mamá, en la escuela me dicen cabezón.
No les hagas caso hijo, y ahora ve a la verdulería y tráeme 3 Kilos de zapallitos, 2 Kilos de remolacha, 3 Kilos de zanahorias, 2 zapallos y 2 achicorias.
¿En qué los traigo mamá?
En tu sombrerito hijo.
¿Que es una canilla?
Un pelillo blanquillo.
Un médico trataba de levantar el ánimo de un paciente diciéndole:
Su vida no corre peligro, yo mismo padecí esa enfermedad.
Sí, doctor, se lamentó el paciente, pero usted no tuvo el mismo médico.
Era un ladrón tan tonto, que fue a robar a una tienda, y se llevó a los maniquies para no dejar testigos.
Iba caminando en la carretera, eso pasa una chava en un carro convertible y me dice, ¡Súbete!
Y yo le dije:
Pues, ábreme la puerta.
Y ella me respondió:
No idiota, a la baqueta, sino quieres que te atropelle.
Me voy a divorciar.
¿Tu mujer es infiel por casualidad?
No, por costumbre.
Un día el rey león dijo:
¡Súbditos míos!, no tenemos agua y necesito que alguien vaya a traer agua, al otro lado de la selva.
¿Quién es el valiente que quiere ir?
Y nadie contesta, en eso dice la tortuga:
Yo voy.
Bueno, si no hay otra opción, responde el rey león.
Después de dos largos meses se vuelven a reunir. El rey león pide al venado su ayuda, pero este responde que tiene algunos asuntos pendientes por lo que no puede ir.
¿Tú chita, puedes ir?
No, yo tengo que ir a ver a mis cachorros.
¡Maldita tortuga, para qué la mande!
Todos los animales:
¡Sí maldita, maldita, ojalá haya muerto!
En eso se asoma la tortuga bien vestida y dice con tono de enojada:
Bueno si siguen hablando mal de mí, ya no voy, y que me importa que mueran de sed.
Soy pequeño como un ratón, cuido la casa como león, ¿quién soy?
El candado.
Manolo entra a la farmacia.
¿Si? ¿Qué desea?
Mi nenito se enfermó y necesito unas vitaminas.
¿Pero qué vitaminas?
¿Cómo? ¡No le entiendo!
¿Qué vitaminas?, A, B, C, D, ¿cuál?
¡Ah, no!, eso no importa pues, hombre. Mi peque todavía no sabe leer.